Aprender euskara es una declaración de amor a los euskaldunes. Y ayudar a los que estudian es corresponder a ése amor. Ésa es la idea: quien estudia y quien sabe euskara son dos amantes. Topagunea, la federación de amigos del euskara, además, quería dar un tono divertido a esta campaña de grupos de práctica oral, así es que decidimos contar y cantar una historia de amor.